Resumen:  Antes de que Félix Rodríguez de la Fuente consiguiera hacerse oír hasta en el último rincón de nuestra geografía, la sociedad española vivía de espaldas a la naturaleza. La mayoría no veía necesario poner ningún límite a la apropiación de los recursos naturales y muy pocas voces se alzaban cuando desaparecía un bosque o una laguna. Pero el amigo de los animales comenzó a ser asiduo en los medios de comunicación y repitió miles de veces que la naturaleza merecía nuestra consideración, que las decenas de especies de animales en peligro de extinción debían se protegidas legalmente....  Leer