Resumen:  En el mismo escenario de su primera historia, dos países vecinos, uno de animales y otro de personas, vuelve el tierno erizo Jefferson con otra simpática aventura. En este caso desaparece la conejita Simona y deja una cariñosa y sentimental carta a sus amigos Jefferson y Gilbert, a los que ve menos de lo que ella desearía y no aguanta la soldad de la vida que lleva. Jeff, poniendo en marcha las habilidades detectivescas que ya nos manifestó en su anterior hazaña, sin decirle nada a su amigo Gilbert, va a buscar alguna pista a la casa de Simone. La encuentra, la sigue y... descubre que Simone puede haber sido engañada por un falso enamorado para quedarse con el dinero de un seguro de vida. Se lo cuenta a su amigo Gilbert y ambos se ponen en marcha. Después de muchas peripecias descubren que la Simone que siguen no es la que buscan, y que su amante es un ser comprensivo y muy amable. Pistas falsas y fracaso total de la investigación. Lejos de tirar la toalla, ahora es Gilbert el que, visita la casa de Simone y encuentra nuevas pistas. Creen que puede haber sido captada por una secta. ¿Lograrán localizar y traer a su amiga sana y salva a casa? Una vez más, la literatura infantil nórdica nos demuestra que se puede escribir, para niños y niñas, temas personales y sociales de forma inteligente, con mucha seriedad, sin renunciar al humor y al espíritu aventurero, y alejándose de esa orientación noña de la que se recurre con demasiada frecuencia. Se intercalan bellas ilustraciones, en blanco y negro, originales y simpáticas, que retratan una ciudadanía en este mundo de animales como seres pensantes, amistosos y muy solidarios que desearíamos para todo el mundo. Editado también en catalán....  Leer     

Resumen:  El lugar en el que ocurre esta interesante y simpática historia se contextualiza en la nota que aparece en las primeras páginas: "El país en el que se desarrolla esta historia está habitado por animales que no solo caminan de pie y hablan, sino que además pueden pedir prestados libros en la biblioteca, enamorarse, enviar mensajes con sus móviles y también ir al peluquero. El país vecino está habitado por los seres humanos, que son los animales más inteligentes". El erizo Jefferson es feliz, se ha levantado de muy buen humor y se dirige a la peluquería donde se lleva cortando el pelo desde hace muchos años. Al llegar, le resulta extraño ver que está cerrada y decide entrar por una ventana. Dentro encuentra el cuerpo de Edgar, el tejón peluquero, en el suelo, con unas tijeras clavadas en el pecho, y una clienta cabra medio dormida en el secador. Jefferson decide sacarle a Edgar las tijeras del pecho y, en ese momento, se despierta la cabra que comienza chillar y llamarlo ¡asesino! El erizo se asusta y huye corriendo. Se oculta en el bosque y, ante la evidencia de la acusación de la cabra, con la ayuda de su amigo el cerdo Gilbert, deciden investigar por su cuenta y buscar ellos solos al asesino. Las primeras pesquisas apuntan a que podrían ser humanos del país vecino. Y así comienza esta detectivesca historia que trata, con grandes dosis de humor, un problema social, muy actual e importante. Un interesante texto para reflexionar y debatir, con los alumnos y las alumnas, sobre la relación que mantenemos entre los seres vivos y el respeto que nos debemos unos a otros. En cada capítulo se intercalan bellas ilustraciones, en blanco y negro, que representan escenas relevantes de la divertida historia....  Leer