Resumen:  Cuando la señora Meier dijo que iban a asistir a una lectura, todo el mundo empezó a protestar. Kim empezó a dibujar letras en el cuaderno, le importaba un comino que hubiera lectura, nunca le han gustado los libros y mucho menos leerlos. Franz apoyó la cabeza en el pupitre y comenzó a roncar. Solo Petrowna alzó la voz para preguntar si preferían tener clase de matemáticas. La profesora les dijo que dejarán las mochilas en el aula, pero el alumnado pasó de sus palabras y ella, joven y en prácticas, poco más podía hacer. Cuando llegan a una biblioteca nadie sabe para qué han ido a aquel lugar que olía a viejo y a polvo, y, por si fuera poco, Leah Eriksson, una escritora, estaba esperando para leerles su nueva novela. Kim estaba muy atenta porque aquella mujer hablaba de ella, su familia, su vida, sus pensamientos... ¿Cómo era posible? los nombres eran otros pero los hechos que narraba y la historia que contaba eran el vivo retrato de su propia vida y... Una historia de intriga y llena de humor sobre el descubrimiento de uno mismo, la amistad, la traición, el primer amor. Y sobre cómo un libro puede cambiar de un día para otro la vida de las personas. Un bello alegato a la lectura....  Leer